Marta
Molina
Desde el
interior del penal número 5 de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, los presos
pudieron oír hoy los gritos de “libertad” y “justicia” entonados por centenares
de indígenas de El Bosque y voces solidarias a favor de la liberación de
Alberto Patishtán Gómez a 13 años de su encarcelamiento.
Mientras
tanto, afuera, indígenas tzotziles de El Bosque, miembros de Las Abejas de
Acteal e integrantes de El Pueblo Creyente se congregaron desde la mañana para
realizar una misa católica en la entrada del CERESS -Centro Estatal para la
Reinserción Social de Sentenciados- y rezar por la liberación del profesor
tzotzil condenado a 60 años por un crimen que no cometió.
A la intemperie y en frente de una sencilla mesa
improvisada en donde descansaba una tosca Biblia, dos recipientes con ostias
sagradas y dos botellas de agua bendita el párroco de Simojovel, Marcelo Pérez
dio inicio a la eucaristía: “No ser solidarios es ser cómplices de estas
injusticias de los gobiernos injustos”, dijo.
Durante la misa, de alto contenido político y
reivindicativo, se insistió en que la negación de la libertad de Alberto
Patishtán es también la expresión de que los pueblos indígenas están todos
encarcelados: “Es un mensaje del estado, quien tiene en sus manos las leyes
para encarcelar a inocentes y liberar a asesinos como los autores materiales de
la Masacre de Acteal”, señaló el párroco de Simojovel quién imploró la libertad de Patishtán y los pueblos indígenas
“en nombre de Dios”.
Después del
culto, celebrado en tzotzil y en español y durante el cual se entonaron cantos
religiosos al unísono, los presentes marcharon alrededor de los muros de la
cárcel encabezados por el padre Magdaleno Sánchez Ruiz, Párroco de El Bosque,
quien portaba un estandarte de la Virgen de Guadalupe.
A pesar de
las condiciones de dejadez en las que se encuentra el terreno contiguo a los
muros del penal lograron dar la vuelta completa en una especie de abrazo
colectivo de apoyo al profesor tzotzil y a sus compañeros presos injustamente.
“Hacemos
como los peregrinos que dieron vueltas a Jericó para destruir a su enemigo”,
comenta el padre Marcelo Pérez durante la marcha. “Nuestro caminar es una
ofrenda a Dios y un apoyo solidario a Patishtán”, añadió.
Los
integrantes de El Movimiento del Pueblo de El Bosque por la Liberación de
Patishtán celebraron hoy 13 años de su necesario surgimiento, motivado por el
encarcelamiento del profesor tzotzil y comentaron que no pararán de luchar
hasta que su compañero salga libre “porque él es inocente, lo único que hizo
fue querer ayudar al pueblo, le fabricaron un delito por querer destituir a un
presidente municipal autoritario y corrupto, Manuel Gómez Ruiz”, recuerda
Martín Ramírez, profesor y compañero de juventud de Alberto, entre gritos de
“justicia, justicia”.
Leonel
Rivero, el actual abogado de Patishtán, acompañó el acto simbólico en frente
del CERESS 5 y comentó que, como parte del apoyo internacional a la liberación
de Alberto, el día 4 de julio, Baldemar Velázquez -organizador y líder defensor
de los derechos de los campesinos en los Estados Unidos, compañero del luchador
social Cesar Chávez y discípulo de Martin Luther King- visitará a Alberto
Patishtán.
El mismo
Profesor habló desde las entrañas de la cárcel a través de una Carta que fue
leída de la voz de Román a escasos metros de las rejas del penal. Patishtán
externó su agradecimiento a todos los que, el día que cumple 13 años entre
rejas, dedicaron su esfuerzo y creatividad a pedir su libertad: “No me
arrepiento de haber ayudado a mis hermanos pobres, sino al contrario me siento
feliz de haber cumplido un poquito de mi deber y no como una obligación”.
A su vez
expresó que con la ayuda de los que le apoyan –como los que apoyaron a Jesús y
le ayudaron a cargar la Cruz- se siente con fuerzas “y mi cruz que llevo la
siento liviano y sé que llegaré al triunfo en unión de todos ustedes”. Su
carta, terminó con un llamado a la esperanza y un grito de “la Verdad nos hará
libres”
Al finalizar
la marcha, Carmen Gómez Gómez, coordinadora del Movimiento del Pueblo de El
Bosque se acercó a las puertas del penal y organizó una comitiva de 10 personas
para que entraran a visitar a Patishtán insistiendo en que pasaran los
que aún no le conocen. Compañeras y vecinas del profesor, emocionadas, no
dudaron en entrar a visitarle y traspasar los muros del penal para abrazarle en
persona y darle la fuerza necesaria mientras sigue la eterna espera que
decidirá su libertad.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario