Hermann Bellinghausen
La Jornada
San Cristóbal de las Casas, Chis. Con
una misa católica a orillas de la carretera a Ocosingo y una
impresionante marcha alrededor de todo el penal número cinco, donde se
encuentra encarcelado Alberto Patishtán Gómez, centenares de personas,
en su mayoría indígenas de El Bosque, aprovecharon otro aniversario
infame (el decimotercero desde que Patishtán fue encarcelado) para
exigir su libertad inmediata y enviarle a él y a sus compañeros presos
adherentes de la Sexta un mensaje de compañía y solidaridad.
“No es la lucha de un sólo hombre, sino
de todo un pueblo”, expresó el párroco de El Bosque, Magdaleno Sánchez
Ruiz, quien concelebró con Marcelo Pérez Pérez, párroco de Simojovel, el
cual a su vez demandó, “en nombre de Dios, la libertad de Patishtán”.
“Ojalá que el gobierno haga lo que tiene
que hacer, que es liberarlo. No es un favor. Es una exigencia de
justicia”, manifestó la organización Pueblo Creyente. “Si no hay
justicia el pueblo se tiene que levantar y gritar, hasta las piedras han
de gritar”.
Siguieron gritos de “¡libertad”, varias
veces, y luego, “¡justicia”. El llamado “padre Marcelo” indicó, desde el
rudimentario altar a pocos metros del alambrado de la cárcel: “el que
grita no es cómplice”.
Dentro del centro penitenciario, los
presos de la Voz de Amate y Solidarios de la Voz de Amate también se
manifestaron y oraron por sus libertades. Desde ahí hizo llegar un
mensaje manuscrito Alberto Patishtán a las personas que colmaban el
estacionamiento y la entrada, exigiendo al gobierno que lo ponga fuera:
“El motivo de mi aprehensión es porque estuve del lado de los pobres,
oprimidos, hambrientos y sin nada”, expresó el docente originario de El
Bosque, actualmente el más importante preso de conciencia en el país,
que ha desencadenado un importante movimiento internacional por su
liberación.
“No me arrepiento de haber ayudado a mis
hermanos pobres, sino al contrario me siento feliz de haber cumplido un
poquito con mi obligación”, añadió Patishtán.
Terminados la ceremonia religiosa y los
mensajes solidarios como el de los Pueblos Unidos por la Defensa de la
Energía Eléctrica, en la zona Norte (“también nosotros derramamos
lágrimas por los momentos difíciles que has pasado en la cárcel, ya
basta de tu encarcelamiento, llevas muchos años de injusticias”), la
concurrencia caminó alrededor del amplio penal de Los Llanos, para
nerviosismo de los guardias, hoy reforzados por lo demás. La acción
inédita, con un estandarte de la Guadalupana al frente, seguramente
permitió a los presos escuchar las voces de afuera exigiendo su
libertad: “Patishtán, tus amigos aquí están”.
No sólo se mantienen las acciones
internacionales de solidaridad, sino que el profesor Patishtán sigue
ganando amigos relevantes. Su defensa adelantó que próximamente vendrá a
visitarlo el reconocido líder latino estadunidense Baldemar Velázquez, a
quien se considera heredero del pensamiento de César Chávez. Ahora es
vicepresidente de la importante central AFL-CIO y hace años que preside
el sindicato Comité de Organización del Trabajo Agrícola (FLOC, por sus
siglas en inglés).
Hoy, el tiempo corre contra los enemigos
de Patishtán. Aquellos políticos del sistema local de poder que han
impedido sistemáticamente su liberación por motivos poco claros, sin
importar cuánto se ha legitimado ya la exigencia de su libertad y la
convicción fundada de que lleva 13 años tras las rejas sin motivo
alguno.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario